Constitución de los sistemas educativos nacionales.
San Miguel: Martes 26 de mayo.
Luján: Lunes 1 de junio.
1) El largo siglo XIX. (HOBSBAWM).
Dimensión económica: Segunda revolución industrial. La etapa imperialista.
Dimensión política: Conformación de estados nacionales liberales. La democracia parlamentaria.
Dimensión social: La afirmación de la burguesía por oposición al proletariado.
2) Características generales del proceso de constitución de los sistemas educativos nacionales (VIÑAO).
a) Fue un fenómeno mundial.
b) Su constitución coincide con el “largo siglo XIX” (HOBSBAWM).
c) Fue fundamental la acción del Estado, bajo la forma de estado-nacional.
d) Implicó la sistematización de las instituciones educativas preexistentes (ordenamiento, clasificación, unificación de planes de estudios, articulación) y de configuración de nuevas instituciones, dando lugar a la conformación de “sistemas duales”.
e) Implicó la configuración de una estructura burocrática de administración de gestión, ejecución e inspección de las escuelas.
d) Priorizó la titulación de los docentes.
e) Generó culturas específicas para cada uno de los niveles educativos.
2) Constitución del nivel primario.
Universalización de los saberes elementales. La experimentación pedagógica para la articulación colectiva de los niños (QUERRIEN). Legislación de la educación gratuita y obligatoria.
Las explicaciones sobre la constitución del nivel primario: formación de ciudadanos/formación de trabajadores industriales.
3) Constitución del nivel medio.
Aumento cuantitativo de las escuelas secundarias. La aparición de nuevas ramas no clásicas (modernas o técnicas).
Las explicaciones sobre la diversificación curricular: respuesta a los avances tecnológicos vs la teoría de la segmentación.
4) Tipología de los distintos sistemas educativos.
Dijo mi compañero de fábrica aquella mañana, manso y resignado, obediente y con ira contenida, convencido; "el que nace para pito, nunca llega a ser corneta".
ResponderBorrar¡Hola a todos!
Me permito realizar la siguiente opinión y cuestionamiento sobre la misa, como un modo accional de transmisión de saberes, tendiente a la construcción de determinadas representaciones sociales. No es mi intención generar susceptibilidad en nadie ya que no hago referencias a las creencias en si, sino a la estructura de poder de las instituciones religiosas, sus modos de transmisión de saberes y su influencia en la formación de mentalidades y conductas.
Cuestionamiento y opinión, abierto al debate.
Siendo la misa dominical católica un modo de transmisión de saberes accional, donde circulan ideas, conocimientos, ritos y practicas tendientes al refuerzo y mantenimiento del culto y de la tradición eclesiástica, como también de la producción de nuevos acólitos y seguidores, pregunto; ¿Es este espacio religioso de transmisión de saberes una de las formas de construcción de representaciones sociales, es decir, formación del sentido común generalizado, sobre la idea de la “voluntad individual; meritocracia” como motor del progreso económico y social, construyendo a la vez el prejuicio de concebir a la pobreza como el efecto de la “falta de voluntad”; la concepción del “no quieren trabajar”, de la “vagancia” como origen de la marginalidad?
Susana Bianchi: Cáp. III. “La época de las revoluciones burguesas”. “uno de los ámbitos donde mas se advertía la incompatibilidad entre la tradición y la nueva racionalidad burguesa era el ámbito de la “seguridad social”. Dentro de esta moralidad pre-industrial se consideraba que el hombre tenía derecho a trabajar, pero que si no podía hacerlo tenía derecho a que la comunidad se hiciese cargo de él (…) pero esta tradición era algo completamente incompatible con la lógica burguesa que basaba su triunfo en el “esfuerzo individual”. Además, como ya señalamos, si la burguesía consideraba su riqueza como el premio de la Providencia a sus virtudes, resultaba lógica la asociación entre pobreza y pecado (asociación que hubo de tener una larga permanencia) De allí que la “caridad” burguesa funcionara como motor de degradación mas que de ayuda material”
(continua)
Desde mi experiencia en el ámbito religioso, narro este acontecimiento que presencie en muchas oportunidades, cuando supe participar de la iglesia católica y sus expediciones evangélicas.
ResponderBorrarMisión juvenil. Misa dominical. La culpa como arma de control. El ruido del puño que golpea con bronca el pecho del hombre se escucha fuerte. Tres golpes acompañan el grito de la culpa en aquella capilla del monte en el desierto correntino; se reza la oración del pésame; “por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa…”. Nada parece convencer a Don Gregorio de lo contrario, de niño le han educado para sentir culpa, culpa de su misma desgracia. Culpa de su condición de pobreza. Culpa de su incapacidad para progresar. Culpa de no poder mandar a sus hijos a la escuela, de escuchar por las noches los llantos del hambre, culpa de no tener el coraje de salir a robar, culpa de no agachar la cabeza ante las exigencias del patrón, culpa de haber tenido tantas alegrías como hijos. Acepta las culpas ante el señor y golpea impotente su pecho, solo el dolor y el arrepentimiento tiene para ofrecerle al Dios de la culpa. El pecho descubierto detrás de la camisa sin botones, muestra las heridas de sus culpas. Está seguro que es culpable, está arrepentido por las veces que no supo soportar la indigencia sereno y en paz entre las montañas de basura ajena que decoran sus paisajes cotidianos, por las que no obedeció las normas y leyes de Dios y se sintió desconforme con su realidad. Pide perdón por haberse animado a pensar que las cosas podían cambiar. Arrepentido de no saber rezar para pedirle a su Dios lo que necesita. De no saber leer para conocer su palabra por si mismo, “de no haber tenido voluntad para ir a la escuela o para trabajar ‘dignamente’ del cartón” (¿existe la pobreza digna?) Arrepentido por no comprender que todo lo que le sucede “depende solo de su capacidad, de su voluntad, de su esfuerzo individual”. Sus rodillas comienzan a arder. El llanto sujeto en las paredes de la garganta no se anima a salir, siente culpa de llorar. Y lleva su cruz, lo han convencido de que estará a salvo cargándola, aceptado sus cruces y sus culpas, manso y en silencio. Rezando.
La misa, la catequesis, la expansión en el monopolio de la educación privada y otros espacios y métodos para la transmisión de saberes que constituyen la estructura de influencia y educación de la iglesia, tiene su eficaz penetración en las mentalidades y conductas, por una tradición impresa en la costumbre, heredada mediante la educación familiar, y por el gran poder material, simbólico, con el que cuenta la empresa católica, que no es mas que el poder económico que posee y el cual necesita mantener para prevalecer. De allí que la omnipotencia edilicia de la Basílica de Lujan atraiga a tantos fieles y cause tanta admiración y veneración como beneficios económicos.
En aquellos contextos de misión, de “emotividad juvenil” y de un intento pasivo por acomodarnos al mundo, aceptarlo en su aparente inmutabilidad y trabajar inconcientemente en función del mantenimiento de estas estructuras de dominio, hay preguntas jamás realizadas. En las misas dominicales, no se fomenta un espacio de intervención y participación, donde haya libertad de uso de la palabra y se pueda opinar y crear un ambiente de debate. Solo se observa y escucha, es una relación jerárquica; Sacerdote activo arriba; altar; súbditos pasivos; abajo, donde nadie puede o se atreve a preguntar, proponer, cuestionar o responder a temáticas que son mejor obviar; “las causas radicales, reales y concretas de la pobreza en nuestra sociedad”. La tormentosa pobreza del contexto de “Gregorio” se vio aliviada, aunque sea ante los ojos de los misioneros, por las ideas de la humildad y la voluntad de Dios; “Gregorio es un hombre bueno y humilde” se decía. “Vive una pobreza digna”. “Es pobre pero feliz”.
(continua)
Se observa esa realidad como algo natural, dada por causas naturales y preferenciales de abandono, falta de voluntad para el progreso y una especie de hábito a la miseria. Se evita crear una conciencia que posibilite comprender las causas políticas, económicas e ideológicas que la originan y sustentan en el proceso histórico; en sus “continuidades y rupturas”. Como iglesia, se educa desde la omisión, la creación de ingenuidad y misticismo, la concepción de la historia como un hecho lineal, una mera sucesión de etapas y acontecimientos, en los cuales se puede realizar interpretaciones anacrónicas entre la realidad en los tiempos de Cristo y la actualidad, obviando todo contexto sociocultural, económico y político en sus transformaciones históricas, contribuyendo en la formación de una juventud con la falta de conciencia y libertad para cuestionarse que las causas de la pobreza en el contexto actual, difieren de las causas de la antigüedad. Se predica esta representación bajo el lema; “pobres hubo y habrá siempre”.
ResponderBorrarLa catequesis de la iglesia católica es un espacio constituido para la formación e instrucción de las personas desde la niñez, donde se elaboran y modelan a sujetos supuestamente “vacíos” de creencias y culturas, para iniciarlos en la realización de un sujeto receptor y reproductor de conocimientos religiosos, adoctrinado en fin de conformar el ideal de sujeto eclesiástico abstracto; “el sujeto civilizado católico, nacionalista y familiar”, correspondiente a las necesidades y exigencias de la iglesia de poder y del orden social capitalista, de prevenir los conflictos y resistencias que puedan provenir de nuevas formas de sentir, pensar y construir el medio. Estos modos accionales de transmisión de saberes, tendientes a la formación de una conciencia mística, dogmática, preparado para conformar sujetos acriticos, de mentalidad burguesa, moralista, que cumplan una función de espectadores de la realidad, y no de participes de la misma.
La educación privada de las instituciones religiosas católicas constituyen uno de los objetivos de la clase dominante; una educación destinada a pregonar las concepciones de la ideología neoconservadora y neoliberal; entre ellas; “el derecho individual del ciudadano a la libertad de elección”, (Ejemplo; libertad para elegir donde educarse. Una libertad que (bajo esta mentalidad) transforma al individuo en único responsable de su condición intelectual y material de existencia) De este modo, la educación en manos de la iglesia o de privados, responden a sus intereses de clase, apoyando y legitimando procesos políticos y económicos de exclusión y marginalidad (Ej.; las privatizaciones de los servicios y bienes públicos, la descentralización y desregulación de los sistemas escolares nacionales). La educación católica contribuye a promocionar y sostener la legitimidad de la educación privada como eficiente y de calidad, como una “opción” destinada a todos (los que pueden pagarla) en detrimento de las instituciones publicas, concebidas como ineficientes, omitiendo la consecuencia del deterioro de la escuela pública, en las causas de décadas de abandono estatal.
Dijo mi compañero de trabajo, luego de reconocerse "pito" y admitiendo que jamás podrá ser "corneta"... “Aquella mañana, en la fabrica, observé en silencio la acción de las maquinas mientras las maniobraba con dos botones. Al llegar a mi casa la televisión atrapó toda la tarde y observé cada producto que me ofreció, sentí necesidad de consumir. En la escuela nocturna nos pidieron silencio y escuche la voz del profesor que nos arrojaba datos. Sentí necesidad gritar. Al día siguiente, ya domingo, espere ansioso la diez de la mañana para presenciar la misa y liberarme de la opresión de la semana, y sentado, solo debí observar al sacerdote hablar en la altura del altar. Sentí la necesidad de ver televisión”
Gracias por el espacio y saludos. Juan García.
Mi crìtica no es a la materia en particular,dado que me interesa mucho como es enseñada, mì crìtica es a la cantidad de material que se da, el cual no puede leerse en profundidad,excepto que uno no trabaje, lo cual me lleva a pensar que la carrera es sòlo para una elite.
ResponderBorrarHola Juan:
ResponderBorrarGracias por tu mensaje. Es muy interesante porque abre muchos temas para discutir.
Sería muy bueno que el resto de los compañeros se animara a opinar e intervenir.
Por mi parte, me surge como reflexión la pregunta acerca de cuánto de continuidad y cuánto de ruptura representa la escuela laica.
Saludos.
Paula Spregelburd